Las festividades de Santiago y Santa Ana se celebran el finde semana más próximo al 25 y 26 de julio en la ermita que rinde honor a la Madre de María ubicada en el barrio de “El Congo”. El sábado por la noche se reza una salve y posteriormente se dispara un castillo de fuegos artificiales y se celebra una verbena popular con refrigerio para los asistentes. El domingo por la tarde se celebra una misa en la ermita, durante la cual se bendicen los tradicionales “panecillos”; seguidamente se procesiona con la imagen de Santiago y Santa Ana. Durante el recorrido se venden los “panecillos” bendecidos y los beneficios sirven para el sufragio de la fiesta. La procesión finaliza de nuevo en la ermita y se dispara una traca fin de fiestas. Al día siguiente se ofrece una misa por los fieles difuntos.
Un poco de historia sobre Santiago y Santa Ana en Horcajo de Santiago
El 26 de julio de 1700, justo un día después de entronizar la antigua imagen de la Purísima Concepción en la iglesia parroquial, se colocaba en esta ermita la talla de Santa Ana realizada por el maestro imaginero Juan Pablo de Estrada (mismo escultor que la antigua talla de la Inmaculada). Durante el trascurso de la Guerra Civil, la antigua imagen y el retablo de la ermita fueron trasladados a Cuenca. Tras la contienda civil de 1936-1939, el 31 de mayo de 1961 y coincidiendo con la restauración de la ermita, se adquirió una nueva imagen de Santa Ana con la Virgen niña, la cual preside la ermita que lleva su nombre.
Recientemente, la antigua talla de Santa Ana fue recuperada y recibe culto en su ermita. El antiguo retablo de estilo gótico obra del Maestro de Horcajo aún continúa en la capilla del Seminario Mayor Diocesano de Cuenca.